Si quieres conocer algunos de los métodos de memorización más usados en el mundo de las oposiciones no te pierdas este artículo. A continuación te contamos todos los trucos y las mejores técnicas.
Técnica de recuerdo
Consiste en hacer el esfuerzo consciente de recordar. Por ello, cuando estudies, retira un momento tus apuntes o libros que hayas leído e intenta repetirlos en tu cabeza. Utiliza tus palabras y asegúrate de que lo comprendes. Dentro de esta técnica, también puedes realizar lo que se denomina la escucha activa que consiste en que mientras lees te haces preguntas sobre el texto y a continuación las contestas. También, puedes optar por escribir con tus palabras lo que acabas de leer, ya que escribir a mano refuerza el proceso de aprendizaje y memorización.
Técnica de la historia-imagen o visualización
Esta técnica en la que se memoriza una lista de datos consiste en inventar un relato que aglutina todo. La clave para que funcione es visualizar una historia y asociarla a los datos, ya que acordarse de la historia es más fácil que acordarse de datos sueltos. En la historia, te será mucho más fácil recordar todos los vocablos que memorizar cada uno de manera independiente.
Técnica de las iniciales o de los acrónimos
Esta técnica consiste en coger la letra inicial de cada una de las palabras que queramos recordar y crear una palabra nueva o frase con todas ellas. Esta técnica es muy útil para memorizar un listado de términos: nombres de países, ciudades, o fórmulas matemáticas o de economía.
Método del lugar o LOCI
Se basa en la memoria espacial que consiste en recordar información con una estructura o jerarquía clara, es decir, es asociar los datos que quieras recordar a un lugar que te sea familiar, por ejemplo, tu casa. Si estás estudiando la tabla periódica de los elementos y quieres aprender los 7 gases nobles, solamente tienes que hacer lo siguiente: Haz la vinculación puerta: helión, interruptor: neón, llaves: argón, móvil: Kriptón, abrigo: xenón, bolso: radón y zapatillas: oganesón.
Técnica de los números
Si eres estudiante de matemáticas o historia, es totalmente probable que recuerdes una gran cantidad de fechas o cifras. Para memorizar números largos tienes que desglosar las cifras de cada número o fecha y sustituir cada una por una palabra que tenga el mismo número de letras. Entonces, con todas ellas formarás una frase que será la que memorices. Ejemplo: para recordar que la Constitución de EE.UU se aprobó el 4 de julio de 1776 puedes pensar en la siguiente frase: John(4) viajaba(7)a (1) conocer(7) Estados(7) Unidos (6)
Método Herigone
Se basa en un método que consiste en asignar a cada dígito del 0 al 9 como mínimo una consonante. La idea es convertir los números que son datos abstractos en algo más concreto. Ejemplo: 1T, 2N, 3 M, 4 C, 5 L, 6 S, 7 F, 8 X, 9 V, 0 R. Y formamos una palabra: 1908=TVRX.
Método Absume
Es un método que pretende que el cerebro recuerde imágenes absurdas para establecer asociaciones mentales persistentes, es decir, se pretende que la información sea recordada en el largo plazo. Ejemplo: La obra de Salvador Dalí: “La persistencia de la memoria” Existe la interpretación extendida de que los relojes derretidos eran un símbolo de la relatividad del espacio y el tiempo.
Método Feynman
Consiste en establecer un método de 4 pasos para facilitar la tarea de aprendizaje basándose en la siguiente idea: Cualquier materia por compleja que sea puede desgranarse de forma que sea entendible y explicativa. Por ejemplo: Paso 1: selecciona un tema a estudiar. Paso 2: Tienes que desarrollarlo en papel. Paso 3: Revisa y completa de nuevo en el papel cuestiones que te faltan por desarrollar. Paso 4: Explicarlo a una persona que no entiende de la materia.
Método Acrósticos
Este método consiste en crear una palabra o frase empleando la primera letra del concepto que quieres memorizar. Ejemplo: para un opositor a profesor de psicología, la frase “ Andebi” sería el acróstico para recordar las enfermedades. Ansiedad, depresión y bipolaridad.
Técnica Pomodoro
Se basa en establecer periodos de alta concentración. Divide el tiempo que quieras dedicar a una actividad en intervalos de 25 minutos. Una vez finalizado los 25 minutos se hace una pausa de 5 minutos. Esta técnica establece rutinas de 4 bloques, tras los cuales se realiza un descanso de 20 a 25 minutos. Además, tenemos este artículo en el que te damos toda la información necesaria para aplicarlo.
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