Un buen temario de oposición es el material clave que un Opositor necesita para prepararse con garantía de éxito y obtener su ansiada plaza (aunque no lo es todo):
Es necesario que se adapte de la manera más fiel posible al contenido exigido en el programa recogido en la convocatoria de la Opo, para ello verifica que ha sido elaborado por profesionales en la materia (preferiblemente empleados públicos dedicados a la formación de un Cuerpo o Grupo igual o Superior al que te estás preparando). No siempre las grandes editoriales tienen los mejores temarios, a veces sólo tienen el mejor marketing.
Siempre que puedas, contacta con un preparador particular, especializado en tu Opo, porque será quien mejor conocer el contenido que se exige, los detalles, las preguntas oficiales teórico-prácticas, las exigencias en los diferentes exámenes, los pequeños y grandes detalles, y las dificultades de cada prueba. Ese asesoramiento individual, es vital junto a un buen temario para acortar tiempos en tu preparación.
Debe estar bien estructurado, recogiendo todo el programa de la Opo, separando los bloques, temas y epígrafes cuyo dominio se exige y recopilando en su contenido la teoría necesitaría para responder a las preguntas oficiales preguntadas en años anteriores o preguntables en el futuro. Además, debe ser riguroso, es decir debe ajustarse a la literalidad de las normas.
Es importante, que siempre esté actualizado, (si es a fecha de compra mejor que mejor) y que contenga acceso a un sistema permanente de actualizaciones, dado que la Opo es un proceso largo, y las normas están sometidas a continuas modificaciones.
Al grano, es decir debe tener una extensión razonable. Evita caer en el error de que el temario más extenso es el de mayor calidad, recuerda que muchas veces menos es más, los temarios deben ser lo más ajustado posibles, y filtrar y eliminar “la paja” de relleno que muchos contienen, de manera que sea más fácil de estudiar y repasar al estar más centrado en el contenido exigible oficialmente.
Una alternativa, es la confección de nuestro propio temario a partir de las leyes y normas que las podemos encontrar en los distintos boletines oficiales, de acceso gratuito por internet y otras fuentes secundarias. No obstante, a nuestro juicio es un trabajo que requiere mucha inversión de tiempo, que no todo Opositor precisamente tiene. Igualmente conlleva la dificultad de estructurar todo un temario con sus modificaciones permanentes, por lo que es algo que desaconsejamos sobre todo si te inicias en el mundo de las Opos. Si ya eres un experto y llevas años Opositando quizá sí que haya partes que optes por repasar directamente por la normativa del BOE, pero llegar a ese punto requiere un bagaje y un buen conocimiento de la Opo.
Finalmente recuerda y ten claro, que no todo es el mejor temario, porque por desgracia el temario no se estudia sólo. En una Opo son muchos los factores que influyen en tus resultados: buena planificación y método de estudio y repasos, aptitud, actitud, disciplina, fuerza de voluntad, constancia, ilusión, motivación etc…
Mucho ánimo y recuerda: HAY UNA PLAZA QUE LLEVA TU NOMBRE